Hace un año le detectaron un cáncer de pecho. Cuando tienes un contratiempo semejante puedes actuar de dos formas: hundirte o luchar y sacar lo bueno de las ocasiones para crecer, para hacerte más fuerte, para aprender.. ¿Cómo reaccionaste tú? ¿Y tu familia?
Mientras esperaba para el resultado de la biopsia, no sabía cómo iba a reaccionar. Estaba asustada y rezaba pidiendo fuerzas para poder superarlo. Tardé unos días en asumirlo y poder pronuciar las palabras cáncer, tumor, oncólogo,etc.
Decírselo a mis padres y a mis hijos fue el momento más duro. Tuve todo su apoyo. Enseguida lo hice público en mi entorno, era un nuevo capitulo en mi vida y necesitaba compartirlo.
UN CONSEJO DECISIVO
He pasado mi tratamiento de quimio y radio increíblemente bien, gracuas a una actividad física espectacular , la Marcha Nórdica. ¡Quién me iba a decir que me haría instructora de Marcha Nórdica…y que me harían una entrevista!… ¡Así de sorprendente es la vida!
Todo empezó el 25 de julio de 2015, ya llevaba 3 semanas de la primera quimio. Estábamos con el Doctor Rafael López, oncólogo de Santiago de Compostela y amigo de la familia que me dijo: “ El secreto de la quimio para eliminar toxinas es, caminar dos horas diarias, si o si, aunque tengas tus días malos. Y beber mucho líquido.”
No era una mujer deportista, pero si activa (como cualquiera de mi edad,48) y caminar todos los días me supondría mucha carga en las lumbares y contracturas en mis trapecios como consecuencia de mi escoliosis congénita. Usé un aparato desde los 9 años hasta los 18, me parece importante contarlo, para entender aún más, todos los beneficios de esta actividad física que empecé a practicar.
Al llegar a casa, dándole vueltas a esa “necesidad” de caminar, me acordé de la conversación que tuve unos 3 años, con unos amigos que comentaron lo bueno que era caminar con bastones. Cogí el iPad y tecleé: caminar con bastones, beneficios. Empecé a leer y enseguida sentí que así podría cumplir las dos horas diarias.
Y TE LO TOMASTE MUY EN SERIO…
Rápidamente escribí a mi hermana Begoña,
para que me comprara unos bastones especiales de NW.
Estuve viendo videos y leyendo sobre el NordicWalking, para hacerlo bien. Había una técnica, existía un método,..¡estaba pletórica! La quimio hacía su trabajo en mi cuerpo y yo preparada con los bastones para eliminar toxinas. Éramos un equipo. Sin buscarlo ya había empezado a entretener mi mente, y el cáncer y la quimio pasaron a un segundo plano. Era ya monotemática, con la Marcha Nórdica…hasta hoy.
Y ASI FUISTE ARRASTRANDO A GENTE…
La primera fue mi hermana Begoña que es muy deportista. Mientras yo bastoneaba ella corría iba y venía pendiente de mí, me veía feliz, y Bego, acompañandome en ese tiempo, me ayudó mucho y entre otras cosas me enseñó la importancia de estirar después de las caminatas. Y las dos seguimos bastoneando hasta ahora. No hubiera andado todos los kilómetros que llevo recorridos, ni el Camino de Santiago que estoy haciendo, sin los bastones, eso lo tengo muy claro.
Además de mi hermana, también empezó mi familia, y mis amigos. Les ponía bastones y me aprovechaba de la situación para hablarles de las maravillas del NordicWalking. Me sentía genial y eso se transmitía en mi casa,en mi familia, siendo muy positivo para todos.
Un año después camino 5 veces a la semana con grupos en cada salida. Todas las semanas sigue viniendo gente nueva. Y es maravilloso ver el fondo físico que cogen enseguida y todo lo bueno que me hablan de la Marcha Nórdica.
Todos los Walkers, hablan con tanta pasión del NW como yo.
¿CÓMO TE AYUDO LA MARCHA NÓRDICA?
No dejo de dar gracias a Dios, por haber puesto dos bastones en mi camino. En la tercera quimio añadí una hora más a mis caminata, dos por la mañana y una por la tarde, sentía que en cada quimio iba mejor. Ha sido fundamental no dejar ni un solo día de caminar, (excepto los días que me daba la quimioterapia).
NO SOLO FÍSICA SINO TAMBIÉN MENTALMENTE ¿VERDAD?
Solo pensaba y hablaba de lo bien que estaba “gracias” a la Marcha Nórdica. Al encontrarme tan bien fisicamente, arrastraba a mi mente al bienestar. Lo digo plenamente convencida de lo que he sentido.
Desde el primer momento he sentido los grandísimos beneficios tanto físicos como mentales de esta actividad física tan espectacular. Es mucho más que caminar con bastones.
Todos sabemos caminar ( sin bastones), pero con la Marcha Nórdica, la cabeza va concentrada en la técnica, entonces tus pensamientos no viajan, no piensan en problemas, y eso produce bienestar, al hacerlo regularmente es como el móvil, te recargas para todo el día.
El NordicWalking simplemente pone unos bastones al caminar natural.
A cada paso e impulso del bastón vas sintiendo vitalidad… Tienes que ir erguida y eso permite que salgan las endorfinas. Levas un paso amplio y brazos largos, que te provoca un caminar activo, tu cuerpo se va recargando de energía y bienestar.
Es tan increíble que parece mágico.
Mueves el 90% de los músculos y reparte el peso entre las piernas y los bastones, liberando así una gran carga a la espalda, (perfecto en mi caso). Los bastones acaban siendo prolongación de tu cuerpo.
Puse toda mi atención y todos mis sentidos en cada paso que daba, quería hacerlo bien, ya que tendría que caminar todos los días, dos horas y con quimio, no quería lesionarme y dejar de eliminar toxinas.
Cuando mejor es la técnica…mayor beneficio.
Es muy necesario ponerse en contacto con instructores de Marcha Nórdica que te enseñen bien. Puedes hacer NW salud, NW deportivo, NW mindfulness y NW competición.
Me siento muy orgullosa de haber compartido esta completísima actividad física.
La MN es mi cruzada, hago lo que me hubiese gustado que hicieran conmigo antes de ser deportista, facilito lo más posible para que la gente pueda conocer sus beneficios
Te das cuenta en esta vida lo importante que es la salud y no crear problemas sino buscar soluciones
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