Era la asignatura pendiente de la moda española. Diseñadores y talentos de esta isla y del resto de Canarias con trayectoria internacional se han dado cita en la primera Fashion Week de Fuerteventura, un escaparate perfecto para crear de una vez un vínculo de la moda canaria con la europea y la mundial.
Fotos: Pablo Arribas
‘Siempre pensé que Fuerteventura era un escenario maravilloso con una diversidad de paisajes deslumbrante: desérticos, ‘lunares’, playas de un blanco cegador o volcánicas, una naturaleza y vegetación diferentes. ¿Por qué sacar partido de esta riqueza sólo a base de tour operadores y hoteles de ‘todo incluído’, opina Rosa María Perdomo, directora de la primera edición de la Fuerteventura Fashion Week.
-Subir ese primer peldaño habrá sido más que árduo.-Como soy mujer, al principio no me hacían mucho caso pero yo me dije ‘p´alante’ y al final he tenido 50 empresas apoyándome, además del cabildo de la isla, el Patronato de Turismo y el ayuntamiento de Puerto del Rosario. Ha sido un momento ideal porque ha servido para solidarizarnos con nuestros hermanos de La Palma y recaudar donativos. Pensamos que si aquí se han rodado películas con los mejores actores, shootings de moda de las firmas de más prestigio, vienen los campeones de surf, también puede verse en una pasarela trajes de baño, alta costura, ropa bohemia, collares étnicos, trajes de novia, añade Rosa María.
Durante un fin de semana, el Palacio de Formación y Congresos de la isla ha sido el escaparate perfecto para crear un vínculo con la moda europea y mundial, al que han acudido prensa especializada, influencers, marcas, compradores, bloggers. El objetivo es dar visibilidad a los diseñadores canarios y posicionar a Fuerteventura como punto importante en la industria de la moda para contribuir al desarrollo de la isla.
Inauguró la pasarela un veterano diseñador canario, Jose García Costura, que ha centrado su colección en el sector del surf, tan en alza en Fuerteventura que cada vez es más grande el mostrador del aeropuerto para facturar ‘Sólo tablas de surf’. Trajes de baño muy sobrios pero originales, con cuadros inspirados en la obra de Mondrian, según opina su propio creador. Monos básicos y holgados para quitarse toda la ropa mojada y estar seco de un plumazo…
El siguiente desfile, mi favorito de ropa, fue el de la firma Maison Yolé, creada por una egipcia y un italiano, que me pareció la propuesta más original y arriesgada, en ropa, hasta llegar a ese límite en que, por solo unos centímetros, puedes pasar de la modernidad y el hallazgo a la horterada. Ellos se quedan en la novedad con buen gusto, en la que todo invita a ser original y sorprendente: el cambio constante de volúmenes, los mil y un detalles divertidos: pompones en los calcetines largos o en las gorras, vestidos construidos a base de muchas asimetrías, que recuerdan al arquitecto Gianfranco Ferré, DEP. Combinaciones y accesorios con mucho sentido del humor.
MÓNICA LLOP Y LOS VIENTOS DE ÁFRICA
Aparecen en escena los collares, pendientes, gargantillas, pulseras, de Mónica Llop, una mujer repleta de energía, que presentó una colección de su firma Tanenmerk (gracias en guanche) llamada … ‘Fuerteventura, vientos de África’. Conocía la increíble trayectoria profesional de Mónica: colecciones artesanales para todas las tiendas de vanguardia de Nueva York y un montón de estados norteamericanos. El Museo de Arte Moderno de Chicago compró una colección entera que presentó en París. En España ha diseñado para Uterqüe, Oysho y tantos modistas y firmas conocidas. Un periplo agotador en el que ella revisa cada pieza.
Esta vez han sido accesorios grandes con una inspiración étnica, de fusión, en los que, como ella dice, ‘me ha inspirado esta isla mágica, tan especial, llena de lugares de ensueño, pero también la presencia de África que pulula siempre en el aire, la música que compone mi hermano entre el jazz, el swing, el blues. Son muchos posos culturales a la vez”. Y por la pasarela desfilaron piedras semipreciosas de colores diferentes mezcladas entre sí o con cadenas finas y muy largas en cascada, bolas y rectángulos de marfil que forman filigranas, gargantillas de cuentas cuadradas rematadas con cientos de flecos de seda …. Detalles muy distinguidos para cualquier estilo de vivir, pensar y vestir.
Camila Rocha clausuró la primera jornada con un desfile de Alta Costura a base de vestidos muy sofisticados, telas lujosas y llamativas para cuando vuelvan del todo las fiestas y cócteles.
En la segunda jornada resultaron muy distendidas, ponibles y, sobre todo, bohemias, las propuestas de Cebra Culture y cerró la el día la alta costura de Benjamín Friman, elegante, con un colorido especial y reservada para las grandes ocasiones.
Os esperamos en la próxima edición de la Fuerteventura Fashion Week.
Por Eva Reuss
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