La articulación temporomandibular o ATM conecta la mandíbula con el resto del cráneo y, a veces, puede originar problemas que limitan, entre otras, las funciones de masticar y hablar.
Un 8% de jóvenes adultos y un 16% de adultos son los más perjudicados.
La ATM  la forman dos articulaciones (izquierda y derecha) que funcionan en sincronía.  La constituyen numerosos músculos, ligamentos y los llamados cóndilos (extremidades de hueso redondeada ) mandibulares.
Los síntomas principales de estas disfunciones son: dificultad o dolor al abrir y cerrar la boca, migrañas, dolores de cuello, hombro y espalda, zumbidos en los oídos, sensibilidad dental, oclusión de la boca incorrecta que provoca bruxismo y desgaste dental, así como contracturas musculares y
molestias cervicales.
La Dra. Verónica Rubio, especialista en Oclusión y Disfunción Temporomandibular de la Clínica Vilaboa, afirma que la evolución de los problemas de ATM es crónica. Si no se acude pronto a un especialista en ATM,  los síntomas empeorarán progresivamente.
“En Vilaboa hacemos una evaluación y diagnóstico.
Trabajamos con férulas de descarga, prótesis y fisioterapia con lo último en aparatología para aliviar el dolor y disminuir las contracturas, así como con un SPA para rebajar el nivel de tensión y estrés, mejorar hábitos higiénicos… “. La Dra. Rubio cree que ‘Los problemas de ATM se deben, sobre todo, al estilo de vida actual: malas posturas, sobre todo hábitos parafuncionales (involuntarios e inútiles), es decir, malas posturas de cadera y columna, no sentarse con la espalda recta, calzado inapropiado, hacer deporte o ejercicios no dirigidos siempre por un profesional, mala alimentación….
todo ello produce desgaste dental”.
Para prevenirlo es importante vigilar los hábitos alimentarios, evitar la teína y la cafeína, que agravan los síntomas, cuidar la higiene postural o cuáles son las posturas ergonómicas o recomendadas y hacer ejercicio dirigido diariamente.

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